CAPÍTULO I. En el que narro las singulares circunstancias de mi encuentro con un viajero, camino de la ciudad de
Samarra, en la ruta a Bagdad qué hacía dicho viajero y cuáles fueron sus palabras.
CAPÍTULO II. Beremiz Samir, el Hombre que Calculaba, relata la historia de su vida.
Cómo me enteré de los cálculos prodigiosos que practicaba y cómo nos convertirnos en compañeros de viaje.
CAPÍTULO III. Donde se cuenta la particular aventura de los treinta y cinco camellos que debían ser repartidos
entre tres hermanos árabes
Cómo Beremiz Samir, el Hombre que Calculaba, logró un trato que parecía casi imposible, dejando totalmente
conformes a los tres interesados.
La ganancia sorpresiva que obtuvimos en la transacción.
CAPÍTULO IV. Sobre el encuentro con un rico jeque, que había sido herido y que estaba hambriento.
La proposición que nos hizo sobre los ocho panes que temamos y cómo se resolvió, en un instante, el justo
reparto de las ocho monedas que obtuvimos a cambio.
Las tres divisiones de Beremiz.
La división simple, la división cierta y la división perfecta.
Elogiosas palabras que un destacado visir ofreció al Hombre que Calculaba.
CAPÍTULO V. De los maravillosos cálculos realizados por Beremiz Samir en el camino hacia El Ánade Dorado,
una hostería, para descubrir el número preciso de las palabras dichas durante el transcurso de nuestro viaje, y
cuál sería el promedio de las palabras pronunciadas por minuto.
Donde el Hombre que Calculaba da solución a un problema y se determina la deuda real de un joyero.
CAPÍTULO VI. De lo acontecido durante la visita al visir Maluf Del encuentro con el poeta lezid, quien no creía en
las maravillas del cálculo.
El Hombre que Calculaba cuenta un grupo de camellos deforma muy original.
La edad de la novia y un camello sin oreja.
Beremiz halla la "amistad cuadrática" y cuenta del Rey Salomón.
CAPÍTULO VII. De nuestra llegada a la plaza de los mercaderes.
Beremiz y el turbante azul.
El caso de "los cuatro cuatros".
La cuestión de los cincuenta dinares.
Beremiz soluciona la disputa y por ello recibe un obsequio.
CAPÍTULO VIII. Donde Beremiz habla de geometría
Del encuentro con el jeque Salem Nasair y los criadores de ovejas, sus amigos.
Beremiz soluciona la cuestión de las veintiuna vasijas y otro problema causando asombro entre los mercaderes.
Cómo explicar la desaparición de un dinar en una cuenta de treinta.
CAPÍTULO IX. Donde se cuenta la visita de nuestro amigo, el jeque lezid, el poeta.
La mujer y las matemáticas.
Beremiz es convocado para enseñar matemáticas a una joven hermosa y misteriosa.
Beremiz habla de su amigo y maestro, el sabio Nó-Elim.
CAPÍTULO X. De nuestro arribo al palacio de lezid
El molesto Tara-Tir no confía en los cálculos de Beremiz
Los pájaros enjaulados y los números perfectos
El Hombre que Calculaba exalta la bondad del jeque
De la música que llegó a nuestros oídos, llena de melancólica añoranza como el canto de un ruiseñor
CAPÍTULO XI. Del comienzo de Beremiz con las clases de Matemáticas
La frase de Platón
Dios es la unidad
¿Qué es medir? Las partes de la Matemática
La Aritmética y los números
El Álgebra y las relaciones
La Geometría y las formas
La mecánica y la astronomía
El sueño del rey Asad-Abu-Carib
La "alumna invisible" envía una oración a Allah
CAPÍTULO XII. En el que Beremiz muestra un gran interés por el juego de la cuerda
La curva del Marazán y las arañas
Pitágoras y el circulo
El encuentro con Harim Namir
El problema de los sesenta melones
De cómo el vequil perdió la apuesta
La voz del muezin ciego llama a los creyentes a la oración del mogreb
CAPÍTULO XIII. De la visita al palacio del califa y de la audiencia concedida
De los poetas y la amistad
La amistad entre los hombres y la amistad entre los números
El Hombre que Calculaba es ponderado por el califa de Bagdad
CAPÍTULO XIV. De lo sucedido en el salón del trono
Los músicos y las bailarinas gemelas
Cómo Bererniz reconoció a Iclimia y Tabessa
La envidia de un visir, su critica a Beremiz
El elogio del Hombre que Calculaba para los teóricos y los soñadores
Es declarada por el rey la victoria de la teoría sobre la vulgaridad de lo inmediato
CAPÍTULO XV. Nuredin regresa al palacio del califa con la información que obtuvo de un imán
Cómo es que vivía el calígrafo en la pobreza
Un cuadro completo de números y el tablero de ajedrez
Beremiz diserta sobre los cuadrados mágicos
Un Ulema hace una consulta
El califa desea que Beremiz narre la leyenda del "juego del ajedrez"
CAPÍTULO XVI. Donde Beremiz Samir relata al califa de Bagdad la famosa leyenda sobre el nacimiento del juego del ajedrez
CAPÍTULO XVII. El Hombre que Calculaba es consultado en innumerables ocasiones
Creencias y supersticiones
Unidades y figuras
El encuentro entre el contador de historias y el calculador
El problema de las 90 manzanas
La ciencia y la caridad
CAPÍTULO XVIII. Del regreso al palacio del jeque lezid
Poetas y letrados en una reunión
El homenaje al maharajá de Lahore
La Matemática en la India
La leyenda de "la perla de Lilavati"
Los grandes tratados hindúes sobre las Matemáticas
CAPÍTULO XIX. Donde se cuentan los elogios que el príncipe Cluzir dedicó a el Hombre que
Calculaba
Beremiz soluciona el problema de los tres marineros y descubre el misterio de una medalla
La generosidad del maharajá de Lahore
CAPÍTULO XX. De cómo Bererniz dio la segunda lección de Matemáticas
Número y sentido del número
Las cifras
Sistemas de numeración
La numeración decimal
El cero
Escuchamos otra vez la voz de la alumna invisible
El gramático Doreid cita un poema
CAPÍTULO XXI. Empiezo a guardar textos sobre medicina
Importantes progresos de la alumna invisible
Beremiz es convocado para resolver un difícil problema
El rey Mazim y las prisiones de Korassan
Sanadik, el contrabandista
Un verso, un problema y una leyenda
La justicia del rey Mazim
CAPÍTULO XXII. De lo sucedido durante nuestra visita a la prisión de Bagdad
Cómo Beremiz solucionó el problema de la mitad de los años de vida de Sanadik
El instante de tiempo
La libertad condicional
Los fundamentos de una sentencia
CAPÍTULO XXIII. De lo sucedido cuando recibimos una distinguida visita
Palabras del príncipe Cluzir Schá
Una invitación
Beremiz soluciona un nuevo problema
Las perlas del rajá
Un número cabalístico
Se determina nuestro viaje a la India
CAPÍTULO XXIV. El rencor de Tara-Tik.
El epitafio de Diofanto.
El problema de Hierón.
Beremiz se libera de un oscuro enemigo.
Una carta del capitán Hassan.
Los cubos de 8 y 27.
La pasión por el cálculo.
La muerte de Arquímedes.
CAPÍTULO XXV. Beremiz es llamado a palacio.
Una extraña sorpresa.
Un torneo difícil, uno contra siete.
La restitución del anillo.
Beremiz recibe como obsequio una alfombra de color azul.
Versos que conmueven a un corazón apasionado.
CAPÍTULO XXVI. Del encuentro con un famoso teólogo
La cuestión de la vida futura
Todo musulmán tiene que conocer el Libro Sagrado
¿Cuántas palabras hay en el Corán? ¿Cuántas letras?
El nombre de Jesús es citado 19 veces
El engaño de Beremiz
CAPÍTULO XXVII. De qué manera un sabio historiador pregunta a Beremiz
El geómetra que no podía mirar al cielo
La Matemática en Grecia
Elogio de Eratóstenes
CAPÍTULO XXVIII. Continúa el torneo.
El tercer sabio interroga a Bererniz.
La falsa inducción.
Beremiz comprueba que un principio falso puede estar indicado por ejemplos verdaderos.
CAPÍTULO XXIX. Escuchamos una antigua leyenda persa.
Lo material y lo espiritual.
Los problemas humanos y los trascendentales.
La multiplicación más famosa.
El sultán censura la intolerancia de los jeques islamitas.
CAPÍTULO XXX. El Hombre que Calculaba cuenta una leyenda.
El tigre propone la división de "tres entre tres".
El chacal indica la división de "tres entre dos".
Cómo calcular el cociente en la Matemática del más fuerte.
El Jeque del gorro verde elogia a Beremiz.
CAPÍTULO XXXI. El sabio de Córdoba narra una leyenda.
Los tres novios de Dahize.
El problema de "los cinco discos".
Cómo Beremiz reprodujo el raciocinio de un novio inteligente.
CAPÍTULO XXXII. Donde Beremiz es interrogado por un astrónomo del Líbano.
La cuestión de "la perla más ligera".
El astrónomo recita un poema en honor de Beremiz.
CAPÍTULO XXXIII. La ofrenda que hizo al Hombre que Calculaba el califa Al-Motacén.
Beremiz no acepta oro, ni cargos y tampoco palacios.
Una petición de mano
El problema de "los ojos negros y azules"
Beremiz determina el color de los ojos de cinco esclavas
CAPÍTULO XXXIV. "Sígueme -dijo Jesús- Yo soy el camino que debes pisar, la verdad en que debes
creer, la vida que debes esperar. Yo soy el camino sin peligro, la verdad sin. error, la vida sin muerte."
